Te quiero,
desde la ola más íntima de mis 200 millas, hasta el pico más alto, de un Huascarán que canta.
Te quiero ,
con mi sangre de caballero de los mares y con la magia del brujo de los andes.
Te quiero,
Con la esperanza en un hilo y hasta el último cartucho.
Te quiero,
con el último sorbo, de un café, en vida, precediendo al toque sordo de la cucharilla.
Te quiero.
Te quiero ,
desde el ombligo del planeta, hasta el hilo más delgado de mis fronteras.
Te quiero,
te quiero como nadie… te querrá en esta vida. Nadie.
Te quiero ,
con el grito eterno de un Machu Picchu en vida y la sonrisa coqueta de una orquídea.
Te quiero
con la pasión ardiente de mi tierra y los colores de mi bandera.
Te quiero
con mi arte innumerable y mis líneas memorables, inolvidables.
Te quiero
con mi sol… con mi historia y con mis cantos, con el sabor monarca de mi plato.
Te quiero.
Te quiero
como Ollanta a Cusi Coyllor… con el alma terca y el corazón desnudo.
Te quiero,
con mi pobreza y mi riqueza
con mi risa y mis lágrimas.
Te quiero como nadie… te querrá en esta vida. Nadie.
Así te quiero y más todavía…
Porque así soy yo: Perú. Perú en persona, Perú en vida,
Perú por mí, Perú por ti, Perú que puede entregarte el mundo.
Perú entero, de amor, profundo.
Foto: Getty Images
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